Judith Báez tiene 28 años y es madre de dos nenas. Desde hace tres meses, junto a su hermana Fanny, construye su propia casa de 100m² en la zona de loteos conocida como Altos del Paracao. La joven cuenta con el apoyo de la familia y hasta de la abuela de su pareja se su suma a las labores. El sueño de Judith es el de inspirar a otras mujeres y según reveló a Elonce TV, proyecta conformar una cooperativa de trabajo para enseñarles albañilería.
"Hace tres meses que arrancamos, es una obra familiar, y queríamos contar nuestra historia para alentar a otras chicas a que se animen", le contó Judith al programa El Despertador.
Los fines de semana, van a la obra con toda la familia, y los días sábados, se reúnen las mujeres, hasta la abuela del marido de Judith asiste a la obra.
"El asado y la cerveza no pueden faltar, sobre todo los fines de semana cuando viene toda la familia", remarcó Fabián, padre de Judith y Fanny, quien les enseñó albañilería y ahora supervisa la obra. El hombre dijo sentirse "orgulloso de sus hijas" y bregó para que "todo salga bien".
"Mi papá es el que nos enseñó a todas", se confiesa Judith.
"Hace tres meses que arrancamos, es una obra familiar, y queríamos contar nuestra historia para alentar a otras chicas a que se animen", le contó Judith al programa El Despertador.
Los fines de semana, van a la obra con toda la familia, y los días sábados, se reúnen las mujeres, hasta la abuela del marido de Judith asiste a la obra.
"El asado y la cerveza no pueden faltar, sobre todo los fines de semana cuando viene toda la familia", remarcó Fabián, padre de Judith y Fanny, quien les enseñó albañilería y ahora supervisa la obra. El hombre dijo sentirse "orgulloso de sus hijas" y bregó para que "todo salga bien".
"Mi papá es el que nos enseñó a todas", se confiesa Judith.
El desafío de aprender albañilería
Las hermanas tuvieron que, desde conocer los materiales y aprender para qué sirve cada uno, hasta ir a comprarlos a un corralón. "Ahora somos unas expertas en pegar ladrillos", se enorgulleció la joven albañil.
"Empezamos con Procrear en 2016 pero con el cambio del gobierno, presentamos una prórroga, quedamos fuera del programa y decidimos arrancar por nuestros medios", rememoró la joven. "Hace cuatro meses me quedé sin trabajo y ahí fue cuando opté por tomar las riendas, porque no teníamos los recursos para pagarle a un constructor. Empezamos a hacer cimientos, a pegar ladrillos, a hacer contrapiso, y ahora estamos poniendo el techo de a poquito", sintetizó la albañil, al tiempo que alentó: "Todo se puede, y por fin estamos los frutos de todo esto".
"Nos costó muchísimo, sobre todo los cimientos, estuvimos casi un año sin poder salir de ahí, y el día que pegamos los tres primeros ladrillos estábamos más que felices porque ahí arrancó todo", confesó.
Su hermana Fanny, siempre a su lado, acotó: "Ayudando en todo lo que se puede y cada día, aprendiendo un poquito más".
"Empezamos con Procrear en 2016 pero con el cambio del gobierno, presentamos una prórroga, quedamos fuera del programa y decidimos arrancar por nuestros medios", rememoró la joven. "Hace cuatro meses me quedé sin trabajo y ahí fue cuando opté por tomar las riendas, porque no teníamos los recursos para pagarle a un constructor. Empezamos a hacer cimientos, a pegar ladrillos, a hacer contrapiso, y ahora estamos poniendo el techo de a poquito", sintetizó la albañil, al tiempo que alentó: "Todo se puede, y por fin estamos los frutos de todo esto".
"Nos costó muchísimo, sobre todo los cimientos, estuvimos casi un año sin poder salir de ahí, y el día que pegamos los tres primeros ladrillos estábamos más que felices porque ahí arrancó todo", confesó.
Su hermana Fanny, siempre a su lado, acotó: "Ayudando en todo lo que se puede y cada día, aprendiendo un poquito más".
"Hacerlo en familia, es lo que más fuerza nos da"
Fuente : www.elonce.com
Comentarios
Publicar un comentario