La indignación se propagó por las redes sociales estadounidenses cuando se dio a conocer el caso de Victoria Wilcher, una nena de tres con cicatrices en la cara, a quien pidieron que se retirara de un restaurante porque su apariencia "molestaba a otros clientes". Según contó Kelly Mullins, abuela de la nena, a un canal de noticias estadounidenses, Victoria fue atacada por tres perros pitbull meses atrás, por lo que sufrió graves heridas en su rostro, que la obligan a usar un parche en la cara. Tras una visita médica, Mullins decidió llevar a la menor al restaurante de cómida rápida KFC, de Jackson, Mississippi. Según relató la abuela, había ordenado un puré de papas para la menor, dado que estaba hambrienta. "Ella estaba con una sonda en ese momento, pensé que sólo podría tragar el puré. Ellos nos dijeron: 'Tenemos que pedirles que se retiren porque su cara está molestando a nuestros clientes'. (Victoria) entendió exactamente lo que dijeron", recordó
Un espacio para la información , la formación , el humor y siempre hay algo más.